Los Ayuntamientos de Retortillo y Villavieja de Yeltes remiten hace unos días carta y documentación de Berkeley, a La Comisión Territorial de Medio Ambiente y Urbanismo, para solicitar que de forma urgente se incluya en la próxima reunión de la citada Comisión a celebrar el día 3 de junio la autorización para explotación del yacimiento de uranio en Retortillo - Santidad. Dice también Berkeley, que debido al largo tiempo transcurrido con la tramitación de los expedientes, es para nosotros muy importante que el tema pueda ser tratado en citada reunión. (Muchos nos preguntamos que impide a los alcaldes de ambos municipios informar a los ciudadanos de todos los trámites que se realizan en los ayuntamientos relacionados con la mina: Expedientes, comunicados, cartas, acuerdos, licencias, informes, ingresos, etc.)
Dice Berkeley en su informe presentado el 14 de mayo del 2014.
Concesión de
Explotación para Retortillo otorgado por Gobierno
Regional. Válido por un período
inicial de 30 años, prorrogables por otros dos períodos de 30 años; cubre un área de
25,2 kilómetros cuadrados e incluye toda la zona que contiene el depósito de Retortillo; forma parte del
Proyecto Salamanca y es el primer recurso que está programada para comenzar la producción.
La planificación de la siguiente fase de la
perforación en la Zona 7. Esta zona 7 se encuentra a unos 10 kilómetros al noroeste
de la ubicación propuesta para la planta de procesamiento centralizada en
Retortillo.
Mapa de Berkeley, donde los vecinos de Villavieja y Villares de Yeltes pueden observar como los proyectos de la minera se acercaran a sus poblaciones y a otros municipios al noroeste de Retortillo. Esto lo saben los alcaldes, pero .... silencio.
Lo que "NO" dice Berkeley, ni en su informe ni a los medios de comunicación.
Esta autorización queda condicionada a las prescripciones vinculantes que pueda dictar el Consejo de Seguridad Nuclear, en base a la afección por las futuras autorizaciones en relación con las instalaciones radioactivas de primera categoría del ciclo del combustible nuclear.
Los residuos de todas las minas serán enterrados en Retortillo y Berkeley los considera como NORM, sin embargo el Consejo de Seguridad Nuclear informa que la mina es una instalación de primera categoría del ciclo del combustible nuclear y por tanto los residuos deben ser clasificados como radioactivos.
La etapa final del tratamiento del mineral de las minas satélites y después del correspondiente transporte, se llevará a cabo en la planta de tratamiento de Retortillo. Este hecho incrementará las cantidades de residuos radioactivos a almacenar en las instalaciones de Retortillo. En definitiva, es evidente que el proyecto integrado es de mayor alcance que el presentado por Berkeley, por lo que debe modificarlo.
Se fija para el primer año de operación, la cuantía de las garantías financieras muy cercanas a los 3.000.000,00 de euros. Ésta se ha de constituir antes del comienzo de cualquier actividad de laboreo, significando que sin este requisito será nula la autorización de aprovechamiento. "Estas garantías financiaras variarán muy al alza cuando la Junta de Castilla y León tenga en cuenta las prescripciones vinculantes que establecerá el Consejo de Seguridad Nuclear".
Estas y otras muchas condiciones especiales que se le imponen a Berkeley y, que conoceremos en siguientes entradas en este blog, tienen paralizado el comienzo de cualquier actividad minera y cuando se presenten se valoraran, "nunca antes de un año desde su presentación", para proceder a dictaminar.
En este cuadro podemos ver el proceso que seguirá el mineral en Alameda y demás depósitos, y como después de su transporte a Retortillo será aquí donde tengamos el "honor" de procesar la etapa final del uranio y por tanto donde almacenaremos y enterraremos los productos radioactivos de todas las explotaciones. (Los que apoyan esto, incluido el alcalde de Retortillo, estarán contentos de tener un cementerio nuclear como compañero de viaje de todas las generaciones presentes y venideras de la comarca).
A ver cuando finaliza esta pesadilla. Es un sinsentido seguir con intención de abrir una mina de uranio a cielo abierto tan cerca de nuestras casas.
ResponderEliminarEspero que Berkeley tome nota de la noticia de hoy en El País: El Tribunal Europeo paraliza la construcción de una autovía cerca de un espacio protegido por la Red Natura 2000. O sea, como el Yeltes.