Publicado en: El Mundo, domingo 11/05/2014.
STOP URANIO DENUNCIA QUE BERKELEY HARÁ UN CEMENTERIO NUCLEAR EN RETORTILLO.
La plataforma asegura que la compañía "oculta" sus intenciones. / El Consejo de Seguridad Nuclear califica los residuos de la mina de uranio de "radioactivos"
José Manuel Blanco./ Salamanca. La plataforma ciudadana STOP URANIO denuncia que la empresa Australiana oculta que la mina de uranio de Retortillo se convertirá en un cementerio nuclear cuando finalice la extracción del uranio que hay en la zona; confirma una queja ante la Unión Europea por incumplimiento de directrices internacionales de protección ambiental; y anuncia un recurso contra la concesión de la licencia de explotación otorgada por la Junta de Castilla y León hace un par de semanas.
Según la documentación que posee, el Consejo de Seguridad Nuclear ha exigido por dos veces a la empresa que presente un informe mucho más exhaustivo sobre el tratamiento que dará a los residuos de la mina. "La empresa australiana asegura reiteradamente en su proyecto que los residuos de la mina son NORM, es decir, los naturales de una minería natural, pero el Consejo de Seguridad Nuclear los califica de forma tajante de radioactivos", asegura Gabriel Risco, uno de los portavoces de la plataforma ciudadana Stop Uranio.
Ese cambio en la calificación conlleva por una parte un estudio mucho más exhaustivo, incluido el de movimientos sismográficos en la zona. "Berkeley explica que en el hueco que va a hacer para sacar la roca y el uranio, después almacenará los residuos, pero el Consejo le ha dicho que está convirtiendo eso en un almacén de residuos radioactivos, y en el informe, no nos dice como va a ser eso, ni explica las garantías de seguridad que tendrá la zona", a la que Gabriel no duda en calificar de cementerio nuclear.
Por otra parte, denuncia que Berkeley ha troceado sus intenciones en varias minas para conseguir sus objetivos. Una acusación que se basa en que a Retortillo llegará el uranio de la mina satñelite Gambuta, en Extremadura, según el informe del CSN del 30 de junio de 2013. "El proyecto dice que allí harán un tratamiento inicial, y después se transportará en camiones por carretera hasta las balsas de Retortillo. No hay ninguna garantía relacionada con el transporte, y el CSN es consciente de este problema", matiza Gabriel.
La plataforma también califica de "vergonzosa" la Declaración de Impacto Ambiental concedida por la Junta de Castilla y León. "Esa zona está en virtud de directivas europeas y normativa de la Junta, protegida por zona ZEPA - Zona de Especial Protección para las Aves - y LIC - Lugar de Importancia Comunitaria-, es decir, cuenta con una gran protección como valor ambiental. Es incompatible una mina a cielo abierto de 2.517 hectáreas, con esas protecciones. Es incongruente", indica Gabriel, quien califica a la mina de ataque frontal a la dehesa salmantina, puesto que supone la corta de miles y miles de encinas centenarias.
En este sentido, la plataforma, junto al partido político EQUO, han presentado una queja a la Unión Europea contra el Estado Español por incumplimiento de las dos directivas europeas que cumplen la zona. A esta protesta, se puede sumar una tercera por los efectos transfronterizos de la explotación porque al tramitarse la Declaración de Impacto Ambiental debía haberse notificado a Portugal la existencia del proyecto en cumplimiento de otra directiva europea.
Además, anuncian que recurrirán a los tribunales la concesión por parte de la Junta de Castilla y León de la licencia de explotación y advierten a la empresa, que en cualquier caso, la concesión de la licencia conlleva un montón de condiciones impuestos por la Administración.
Tampoco están de acuerdo con la posible concesión de uso de agua que Berkeley ha solicitado a la Confederación Hidrográfica del Duero para utilizar la del río Yeltes. "Este proceso a cielo abierto, para intentar paliar la contaminación atmosférica, utiliza mucha agua. Creemos que no será suficiente con el caudal de ese río, que durante los meses de verano va casi seco y que les obligará a hacer uso de aguas subterráneas", subraya Gabriel.
Por otra parte, critican las cifras de empleo de la mina. "Ellos hablan que van a crear 196 puestos de trabajo, pero no dicen nada de los 65 que van a destruir en el Balneario de Retortillo que ya están consolidados. El Balneario está a 800 metros de la mina, ¿quién va a ir a él en cuanto empiece a funcionar?, asegura Gabriel.
Desde la plataforma califican el proyecto de "inútil". "Enusa, que es la empresa estatal que se ocupa del uranio, se salió del proyecto porque no ha visto viabilidad económica por falta de concentración y riqueza del uranio", comenta Gabriel Risco, al tiempo que asegura que desde ese día, el valor en la Bolsa australiana de Berkeley se ha desplomado.
"Berkeley se empeña en hacer esta mina por estrictas razones especulativas. Que nosotros sepamos no explota ninguna mina del mundo, aunque sí se ha hecho con grandes cantidades de derechos de investigación. Suponemos que su tarea es conseguir esos permisos y luego venderlos, como lo demuestra que en su día estuvo en contactos con una empresa coreana y una rusa", recuerda Gabriel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario