3 de marzo de 2019

QUE NADIE NOS TAPE LOS OJOS CON FALSOS PROYECTOS. EL CAMPO ES LA MEDICINA DE NUESTRO TIEMPO.

El campo es la medicina de nuestro tiempo

Está de moda hablar del mundo rural, están de moda las recetas contra la despoblación, se lleva defender lo rural…, ¿pero realmente todas las personas y colectivos que se erigen como defensores del mundo rural buscan el bien común?

 Retortillo, cuyo ayuntamiento es partidario de que se explote una mina de uranio en su término municipal, sin tener en cuenta la destrucción de puestos e trabajo y contaminación de personas y naturaleza para siempre.

Ganadería en Retortillo. Estos terrenos serían destruidos por la minería de uranio que se extendería solamente por unos pocos años.

Desembocadura del río Yeltes en el río Duero. Aguas limpias hoy y contaminadas si autorizaran la mina y todos sus vertidos a las aguas del río.

El medio rural ha sido históricamente olvidado por las políticas y los poderes económicos y sin duda necesita que lo defiendan. Es necesario proteger al mundo rural de una economía depredadora que no contempla lo común, el intercambio, o cuidar del suelo y el agua sin la lógica del beneficio inmediato. También de esas fuerzas que excluyen al mundo rural y solo entienden por cultura lo que pasa en los auditorios y museos de las grandes ciudades, pero no tienen en cuenta el arte cotidiano de las músicas y versos que acompañan desde hace milenios las siembras, cosechas y tareas de producir alimentos y cuidar los recursos comunes. Es necesario también poner en valor la sabiduría propia de los hombres y mujeres del campo, ese conocimiento acumulado a base de observación y respeto por el entorno y que no se publica en revistas científicas. Las personas que producen alimentos, cuidan el territorio y habitan nuestros pueblos necesitan protección y visibilidad ya que estamos inmersas en un sistema en el que los alimentos son tan solo una mercancía cuyo valor se decide en la Bolsa de Chicago o Tokyo sin tener en cuenta a las personas que lo producen o lo consumen.
 
Está de moda hablar del mundo rural, están de moda las recetas contra la despoblación, se lleva defender lo rural…, ¿pero realmente todas las personas y colectivos que se erigen como defensores del mundo rural buscan el bien común?
 
Si algo hemos aprendido las personas y colectivos vinculadas desde hace décadas con la defensa de un mundo rural vivo es que visibilizar y revitalizar el mundo rural no debe pasar por la confrontación. Ni lo urbano está contra lo rural, ni el ecologismo contra el campesinado. Desde hace más de 20 años organizaciones agrarias y ecologistas, sindicatos y organizaciones de consumidores se sientan en la misma mesa con un diagnóstico común: la necesidad de promover un mundo rural vivo. Esta alianza nos ha demostrado que afortunadamente no es necesario elegir y que no debemos aceptar los falsos dilemas que nos ponen delante: lobo o ganado, naturaleza o agricultura, crecer o cerrar. En un mundo blanco y negro en Plataforma Rural siempre hemos apostado por los grises, por confluir y construir juntas un futuro para el medio rural.
 
Balneario de Retortillo. Semillero de puestos de trabajo y reclamo de miles de personas anualmente para encontrar relajación y salud en sus aguas termales medicinales. Sería seriamente amenazado y obligado al cierre por la mina de uranio a 800 metros del mismo.
 
Suele suceder que, en momentos convulsos y particularmente antes de las elecciones, surgen voces que dicen abanderar lo rural, pero solo buscan generar oposición y conflicto, atrincherarse en posiciones arcaicas, y defender unos valores que ya no pertenecen a la gente que habitamos los pueblos y los cuidamos para poder seguir habitándolos. Desgraciadamente su objetivo no es defender el interés general de la población rural.
 
Defender lo rural está de moda, aunque sea para invisibilizar lo que sucede en el campo tapando los ojos a las ciudades, mientras se construyen macro-explotaciones ganaderas, cementerios nucleares o minas y se especula con los terrenos protegidos. Se condena al 80% de nuestro territorio a ser el “patio de atrás” de las ciudades o bien lugar de ocio y turismo de mantel de cuadros. Pero el campo vive y crea puentes, de pueblo a pueblo y con la ciudad, y surgen voces fuertes e imparables, que acompañan al mundo; también el mundo rural ha cambiado y ahora las mujeres y la gente joven están alzando su voz y lo están reivindicando. Nuevas formas de producir, de cultivar y criar animales de relacionarnos, cuidarnos y habitar, han venido para quedarse.
 
En un escenario de extrema crisis climática y ambiental el campo es la medicina de nuestro tiempo. La vida rural más que quedarse obsoleta, como muchos creen, es un claro reflejo en el que mirarse para encontrar formas de vida acordes con los desafíos del mundo actual. Las alianzas no solo se construyen entre colectivos humanos, existe otro nivel al que no prestamos atención, las alianzas que se generan entre seres humanos y ecosistemas: aprender a convivir en nuestro entorno sin esquilmarlo. Esta es la gran enseñanza del mundo rural. Hoy más que nunca es necesario defender y promover la Soberanía Alimentaria. Urge relocalizar la producción y la comercialización de los alimentos, extender la agroecología, proteger la biodiversidad, el agua y el suelo fértil, cada vez más escasos. Es necesario que cada vez más gente joven vea en la agricultura y la ganadería una opción laboral y de vida digna. Para eso hace falta también romper con esa imagen que aún predomina en muchas mentes y en los medios de comunicación de un medio rural que se resiste al cambio y está anclado en el pasado. Insistir en esa imagen entierra a un mundo rural que necesitamos más vivo que nunca.
 
Lo necesitamos vivo para toda la sociedad en su conjunto, que el medio rural se vacíe no es únicamente un asunto de unos pocos. Sin medio rural vivo nos quedamos sin alimentos, sin paisajes, sin patrimonio, sin cultura rural y un largo etcétera.
 
Es imprescindible el cambio de mentalidad de las personas, empezando por la educación. Se nos educa en que el éxito está en vivir en la ciudad, y para nada esa es la realidad. Tenemos que formarnos en la cultura rural, y ver que son una estupenda opción de vida. Es preciso dejar ya de hablar de despoblación y dar un paso más a la repoblación. Pero con ciertas normas. El mundo rural tiene que volver construir su tejido. Con los servicios básicos cubiertos: sanidad, educación, comunicaciones, internet,... y sobre todo con personas. Hombres y mujeres que vertebren un mundo rural con una agricultura y ganadería sostenible, y que en torno a ella se crezcan las oportunidades, para transformar en granjas, para dar servicios,... en definitiva para volver a dar vida a nuestros pueblos.

https://www.eldiario.es/tribunaabierta/campo-medicina-tiempo_6_873222690.html

5 comentarios:

  1. EXCELENTE AR´TÍCULO.

    AUNQUE EXISTAN MENTES CORTOPLACISTAS Y CONFUNDIDAS QUE NI LO ATISBEN EN LA ÉPOCA ACTUAL:
    EL CAMPO SIEMPRE HA SIDO, ES Y SERÁ LA MEDICINA Y SALVACIÓN DE LA HUMANIDAD

    NO DESTRUYAMOS NUESTRO ÚNICO SALVAVIDAS QUE NOS QUEDA. HAY QUE SEGUIR LUCHANDO HASTA EL FINAL, CON GARRA, FUERZA Y CORAJE, TÍPICO DE LOS HABITANTES DEL CAMPO, HASTA QUE SE VAYAN CON LA CABEZA AGACHADA LOS ESTAFADORES DE BERKELEY.

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  2. Importante artículo, que da pie a fecundos comentarios.
    Sobre cultura: efectivamente, como apunta el articulista, no se reduce a la que pueda proceder de ilustres informados, también lo es la que crean los que viven respetuosa y amorosamente en unidad con su entorno:"agricultores, ganaderos,..."; pues la cultura consiste en establecer modos relevantes de unidad con el entorno"; de donde procede la verdadera sabiduría.
    Otro punto:¡CUIDADO CON LOS QUE, EN TIEMPO DE ELECCIONES, SE PRESENTAN REVESTIDOS CON PIEL DE AMANTES DEL "MEDIO RURAL" Y, EN TIEMPO QUE EJERCIERON EL PODER, DIERON SU VOTO A FAVOR DE ACTIVIDAD, QUE IRREMEDIABLEMENTE LO DESTRUYE Y DESTRUYE TODAS SUS POSIBILIDADES DE FECUNDA PRODUCCIÓN. SEAMOS RESPONSABLES EN DAR NUESTRO VOTO. NO NOS HAGAMOS CÓMPLICES DE DESTRUIR EL HÁBITAT DE FUTURAS GENERACIONES.
    ¡NO A LA MINA!
    ¡SÍ A LA VIDA!
    ¡POR UN CAMPO RURAL VIVO!

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  3. La avaricia humana a la par que su ignorancia es infinita y autodestructiva. En los casos en los que la supervivencia de la colectividad peligre ,la historia nos demuestra que el sacrificio de unos individuos indeseables y egoístas estaría mas que justificado. NO PERMITAMOS QUE NUESTRA VIDA CORRA PELIGRO,NO CONDENEMOS A NUESTROS HIJOS A UNA VIDA PAUPÉRRIMA.NO A LA MINA ,SI A LA VIDA.

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  4. Iberdrola renovables proyecta levantar un gran parque eolico en Villarino.
    Gran noticia!!!que abremos echo las gentes que lo vio nacer, para que en Villavieja el proyecto genial es la destruccion del pueblo con minas de uranio.

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  5. Tiene miga el cuarto comentario. ¿qué pasa que la presidencia de Iberdrola guarda silencio, ante un proyecto tan pernicioso y mortal, como es una mina de uranio a cielo abierto, en el que ha colaborado la propia Iberdrola, con participación determinante, y no levanta la voz su presidente, natural de Villavieja de Yeltes, municipio al que sentencia el proyecto a desaparecer?

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